Tito Pito como cariñosamente se le conoce a Héctor Virgilio nació en La Enea de Guararé el 1943 con lo que cuenta con 76 años de edad. Estudió hasta 5º grado y luego se dedicó a los trabajos del campo.
Ya desde los 6 años de edad acompañaba con un palo al que le ataba dos latas a su primo que tocaba la armónica y a otro joven con la churuca, todas las tardes bajo el asta de la bandera en el parque de La Enea. De ahí le vino la afición a la armónica. Cuando estaba en 3º grado su maestra, la cocaleña Carmen Amaya, le regaló una armónica. Tito Pito recuerda que la primera música que aprendió a tocar fue el himno nacional, y así fue aprendiendo diversas piezas de oído ya que nunca llegó a tomar clases. Con 15 años se compró una buena armónica en la que tocaba en fiestas y cumpleaños al que la gente lo invitaba. Tocaba junto con gente de Guararé que le acompañaba con la caja, el tambor, o el instrumento que su acompañante tocase.
Hace 3 años, Rubén Blades aparece de improviso en su casa y le pide ir a tocar en una presentación que tenía en la ciudad de Panamá. Recuerda que accedió y Rubén Blades le entregó 150 balboas que en la humildad de Tito Pito creyó que se trataba del pago por ir a tocar, pero que Rubén le dijo que era un regalo.
Su vinculación con el Festival Nacional de la Mejorana data de hace 59 años cuando acompañaba con su armónica las décimas cantadas o interpretaba piezas musicales en el Festival.
Su décima preferida es “El tiempo me abandonó” que aquí transcribimos por su belleza, aunque no pudo identificar a su autor:
“Tiempo que tiempo me dió
Para que del tiempo gozara
yo del tiempo no hice nada
Porque el tiempo me engañó
Pues el tiempo busqué yo
Cuando perdido me vi
Y el tiempo me dijo a mí
Que a destiempo lo buscaba
Lo que en otro tiempo amaba
Con el tiempo lo perdí.
Y en aquél tiempo gustoso
Tiempo de tanto placer
Tiempo que me vino a ver
Estando el tiempo goloso
Y en aquel tiempo gustoso
El tiempo me abandonó
Tiempo que lo esperé yo
Pues demasiado contento
A destiempo vino el tiempo
Tiempo que me abandonó